El
Oldham, un equipo que lucha por la permanencia en la tercera categoría del
fútbol inglés, sonrojó al Liverpool, al que apeó de la Copa de Inglaterra tras
imponerse por 3-2, en el encuentro de los dieciseisavos de final.
El
Liverpool, campeón de la competición en siete ocasiones, fue superado por un
equipo menor, alentado por el entusiasmo, que supo rentabilizar sus bazas para
alcanzar los octavos con su victoria en el estadio Boundary Park.